En los primeros días de esta semana, la Delegación Municipal de Claraz adquirió dos nuevas bombas que servirán para garantizar el funcionamiento de la red de agua potable y, por otra parte, alimentar a los camiones regadores que mantienen las calles de tierra del pueblo.

Facundo Iglesias, titular de la dependencia en el interior del distrito, explicó que los artefactos se pudieron conseguir con el esfuerzo del erario comunal y que se trata de “uno sumergible, de 7.5 HP (caballos de fuerza), que está siendo colocado con la ayuda del Emsur para el suministro de agua potable y trabajará en paralelo con la bomba existente”.

 

 

Por su parte, “la otra será colocada en el pozo que tenemos para el riego. Es una bomba autocebante de 2 HP”, que entrega 30 mil litros por hora y servirá para volver a las tareas cuanto antes.

“Son dos adquisiciones muy importantes para Claraz, sobre todo en esta época de calor, ya que tenemos todas calles de tierra y, además, mantenemos lo que es el frente de Ruta 80 (que une a la localidad con Juan N. Fernández). Así que nos viene muy bien”, aseguró el funcionario.

 

 

Al anunciar esta novedad, el delegado recordó que “tuvimos la mala suerte de que hace 15 días se quemó la bomba que estaba y tuvimos que tramitar esta nueva” para que los trabajos puedan seguir funcionando con normalidad.

Con respecto a la que suministrará agua potable, “cuando la red era nueva daba abasto, pero ahora se amplió mucho más porque hay muchas casas que se están conectando”. “En esta época, cuando hay mucho consumo también por las piletas, esa bomba nos viene muy bien para que no tengamos problema de presión”, cercioró Iglesias.